lunes, 10 de septiembre de 2007

El Koala



Uno de los animalitos más atractivos de todo el mundo es el koala. Natural del oriente de Australia, este marsupial sólo se alimenta de las hojas y corteza de eucalipto. Permanece la mayor parte de su vida sobre las altas copas de estos árboles, bajando a la tierra sólo para cambiar de árbol. Cuando la carencia de alimento le obliga a bajar al suelo, anda muy despacio, con una parsimonia asombrosa. Se mueve con tal lentitud que se le ha dado el nombre de "perezoso australiano".


De hábitos seminocturnos, pasa las horas calurosas del mediodía durmiendo entre las hojas de los eucaliptos que constituyen su medio preferido. Al atardecer se dedica a comer; su alimentación se compone de hojitas y yemas de eucaliptos.

Su aspecto, rechoncho y sin cola, es algo similar al de los osos, con los que no tiene ningún parentesco. También es singular su gran cabeza, en la que se destacan las orejas, pequeñas, cubiertas de pelos larguísimos y muy divergentes una de otra; los ojos vivos y el hocico, ancho y chato. El pelaje, muy largo y casi rizado, es espeso, pero blando, fino y lanoso al propio tiempo.

Se le considera como un animal pacífico, que rara vez se encoleriza y que, a lo sumo, profiere un ladrido sordo o un grito estridente cuando está muy hambriento o un enemigo lo provoca; en este último caso, adopta un aspecto bastante amenazador, pero ni siquiera intenta arañar o morder a su oponente.

La hembra da a luz una cría por parto, rara vez dos. Cuando el pequeño ha salido del marsupio, lo lleva durante mucho tiempo a la espalda, cuidándolo amorosamente.

Se adapta bien a la vida en cautividad, en la que no tarda en encariñarse con el guardián a cuya custodia se halla. No conocerás el significado de la palabra ternura hasta que no hayas abrazado a un koala. Con sus ojos dormilones -los koalas duermen un promedio de 19 horas al día-, copetes de pelo blanco y pequeñas patas, los koalas son irresistibles. Aunque su número está disminuyendo rápidamente, la meca de los koalas es el estado de Queensland, en el noroeste de Australia, donde los animales se turnan para ser mimados en santuarios especiales e incluso tienen días libres para recuperar las horas de sueño perdidas.

Se me cuidan.

4 comentarios:

Unknown dijo...

nena, el koala no es el q canta?? el koala?? no hay un bicho mas raro?? de anamales?? no tienes nada mejor q poner?? es q parece q he puesto el discovery channel!!

besotes desde England y gracias por tus animos y consejos...necesitaba sentir cerca a mi gente...

Anónimo dijo...

A veces las apariencias engañan. El koala, además de un animal extremadamente singular, tiene un encanto que va más allá de la estética y que, como bien recogen esas lineas, sólo puede ser comprendido cuando sientes su abrazo.

Mirta Peces dijo...

por si acaso no me da tiempo a conectarme mañana antes del avión...felicidades!

Anónimo dijo...

Muchas gracias Marta.

Y buen viaje!

Amnistía Internacional