Ayer fue un gran día para la Democracia. Una banda terrorista anunció el abandono de su lucha armada y un genocida encontró su inevitable final.
Amnistía Internacional solicita que se investigue la muerte de Gaddafi y se juzgue a sus asesinos. Aunque no les falte razón, en esa campaña no les voy a ayudar.
Por una vez y sin que sirva de precedente haré caso al funcionario más privilegiado del país y volveré mi mirada a la memoria de las víctimas y a su dignidad.
Seguimos en la lucha. No armada. En la lucha desde y para la paz.
2 comentarios:
me encanto la última frase :) te la copio con tu permiso
Toda tuya...
Besos!
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