miércoles, 23 de junio de 2010

El dentista y otros sádicos

Hoy he ido al dentista. Sin que me doliera nada. Ha sido una cita programada a sangre fría.

He llegado tarde porque el transporte público en esta ciudad, por más que digan algunos, y no quiero señalar, sigue dejando mucho que desear. Con cerca de veinte minutos de retraso y la lengua fuera he llegado a la consulta más sofisticada que han pisado mis humildes pies.

Además de tener un arsenal de últimas tecnologías dentales, allí todo el mundo es hiperamable e hiperatento. Desde la recepcionista hasta la doctora o el doctor, a los que sólo ves dos minutos en cada visita, te llaman por tu nombre, te despiden y te desean que te vaya bonito hasta la próxima como si te conocieran de toda la vida.


Por desgracia tengo un pequeño gran historial de visitas al dentista. No recuerdo ninguna vez que la experiencia no me haya resultado, cuánto menos, desagradable. Esta vez no ha sido distinta. Pero tengo que reconocer que nunca me habían torturado la boca con tanta delicadeza.


"Ahora vas a notar mucho ruido y te va a aparecer que te estoy arrancando los dientes".

Cierto. Eso parecía. Pero me juró y perjuró que no me quitaría ninguno.

"Ahora vas a notar una vibración y mucha agua, pero no tiene que doler".

Y no dolía.

"Esto sí duele un poco, pero tienes que aguantar".

Ahí se quedó corta. Se me saltaron las lágrimas del dolor. Pero ella lo decía todo con tanta delicadeza y dulzura que cuando terminó casi estuve a punto de pedirle perdón por quejica.

Me ha dicho que no coma nada caliente ni sólido hasta mañana. Creo que eso me ha dolido más que la "limpieza".
Me arrepentí de haber ido en cuanto la primera chica que me atendió empezó a darle a los botones de la máquina de torturas que tienen allí.

Ir al médico, a cualquier tipo de médico, cuando no te duele nada no es de precavidos, es de tontos. No se puede dar una vuelta por el dentista, por muy simpático que sea, sólo para una revisión rutinaria. Porque siempre va a encontrar motivos para hacerte pupa, con tu consentimiento y previo pago.

Tu vas allí relativamente bien, sana, con tus dientes bien puestos y la mar de feliz. Y vuelves preocupada porque tienes las encías inflamadas, dolorida, con el labio medio caído por la anestesia, que nunca es suficiente para evitar el dolor pero sí para dejarte la cara medio tonta, sin poder masticar y para colmo, un poco más pobre que antes. O mucho más pobre, según el grado de delicadeza con el que te torturen.

Siempre salgo jurando que no volveré. Siempre vuelvo. De momento me quedan otras cuatro visitas programadas, porque para ahorrarme sufrimiento me lo van a hacer "de a poquito". Más lindas que son...

Y lo peor es que el mes que viene le toca la revisión al coche. Un coche que no es nuevo ni viejo, con propensión a golpearse contra lo que se mueve y contra lo estático, que tiene su propia banda sonora, pero que, hasta el día de hoy, me lleva y me trae fresquita a los sitios.

Que el señor nos coja confesados.

Se me cuidan.

9 comentarios:

Malena dijo...

Mundo cruel, en el q sádicos ataviados con bata blanca y aroma a flúor, nos convierten en objetos de su deseo..

A resignarse.., me temo..

Después de ese trance, te dejo bss_dulces y :)´s mágicas..

Male.

Pd: Q to2s tus deseos se vean cumplidos en esta Noche de San Juan..

La_Esperada dijo...

Gracias Malena!

Espero que los tuyos se cumplan también.

Besos!

Anónimo dijo...

te llame ayer al portero electronico dos veces..A las 8 y a las 10.30.Donde te metes?

Unknown dijo...

Más vale prevenir que curar...

Córdoba Uyulala dijo...

Ay, esos dentistas. Si no vas malo, y si vas peor. Al menos... !Ya pasó¡

Carlos dijo...

ESPERADA, HE PUBLICADO YO TU POST.., PRIMERO ME SALÍO DETRÁS
DEL DE CÓRDOBA, CON FECHA 18
DE JUNIO, ASÍ QUE LO COPIÉ
Y LO PUSE HOY..

TODO TUYO!!

COMO OS DIGO ALLÍ, SIENTO NO
PASARME A COMENTAROS, PERO
ES QUE EL TRABAJO NO PERDONA,
Y HASTA QUE NO COJA VACACIONES,
A AGUANTARSE, TOCA..

BUEN FÍN DE SEMANA!

UN FUERTE ABRAZO!

La_Esperada dijo...

Lo malo, Córdoba, es que tengo otra cita para este miércoles... que estoy pensando si anular o aplazar :D

Gracias, Carlos, eres un encanto.

Abrazos a tod@s!

Malena dijo...

Bss y :)´s para comenzar con sabor dulce, la semana..

Sé feliz!

Male.

Anónimo dijo...

Yo hasta que no rabio de dolor no voy al dentista. Unos son sádicos, y otros somos masocas...

Besos.

Amnistía Internacional